Desde ayer, el Museo Dámaso Navarro cuenta con una nueva vitrina titulada "Todos hacemos el museo" en el que se irán colocando, cada varios meses, piezas arqueológicas y etnológicas donadas por vecinos y vecinas de Petrer. De este modo, queremos agradecer la generosidad que han tenido con el Ayuntamiento y con sus conciudadanos, en general, mostrando los objetos cedidos a todas las personas interesadas en conocer la historia de nuestra villa a partir de estas piezas singulares.
Comenzamos esta nueva actividad con un candil de piquera islámico, del siglo XII, prácticamente completo, hallado por Francisco Bernabéu Marín en la partida de Puça. Desde la década de los sesenta del siglo XX, gracias a la labor del Grupo Arqueológico Petrelense, llamado posteriormente Grupo Arqueológico Dámaso Navarro en homenaje a su fundador, se conoce que en esta zona existió una alquería musulmana de notable importancia. De esta alquería (o finca agrícola) procede el candil expuesto, utilizado en aquellos siglos para iluminar las habitaciones, y que fue localizado por el joven petrerense Francisco Bernabéu mientras estaba realizando labores agrícolas.
Además, a la pieza se le ha realizado una aplicación de fotogrametría, creada por Eloi Poveda, para que cualquier visitante, con un móvil con acceso a internet, pueda escanear el código QR que ponemos en la vitrina y, de este modo, mover el candil a su antojo con una rotación de 360º.
Esta noticia ha tenido una notable repercusión mediática al aparecer en el diario Información, Intercomarcal, Petreraldia, El Carrer y TelePetrer.
Comenzamos esta nueva actividad con un candil de piquera islámico, del siglo XII, prácticamente completo, hallado por Francisco Bernabéu Marín en la partida de Puça. Desde la década de los sesenta del siglo XX, gracias a la labor del Grupo Arqueológico Petrelense, llamado posteriormente Grupo Arqueológico Dámaso Navarro en homenaje a su fundador, se conoce que en esta zona existió una alquería musulmana de notable importancia. De esta alquería (o finca agrícola) procede el candil expuesto, utilizado en aquellos siglos para iluminar las habitaciones, y que fue localizado por el joven petrerense Francisco Bernabéu mientras estaba realizando labores agrícolas.
Además, a la pieza se le ha realizado una aplicación de fotogrametría, creada por Eloi Poveda, para que cualquier visitante, con un móvil con acceso a internet, pueda escanear el código QR que ponemos en la vitrina y, de este modo, mover el candil a su antojo con una rotación de 360º.
Esta noticia ha tenido una notable repercusión mediática al aparecer en el diario Información, Intercomarcal, Petreraldia, El Carrer y TelePetrer.
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